El club de los poetas muertos, marco a mi
generación y creo hasta algunas generaciones posteriores.
Robin Willians interpreta al Profesor de literatura:
Jon Keating, un profesor peculiar un ser optimista, siempre alentador, y enseñó
a sus alumnos (y a muchos de nosotros) que todo es posible.
Para mi fue el primer Coach de mi vida: un
sin fin de enseñanzas y nos abrió los ojos a creer en nosotros mismos, a elegir
nuestro propio camino y no tener miedo a equivocarnos. Que somos seres únicos y
extraordinarios de un modo u otro. Nos contagiarnos
por su pasión y entusiasmo por hacer de la vida algo extraordinario. Que hay un
momento para el valor y otro para la prudencia. El que es inteligente, sabe
distinguirlos. Nos enseño el valor y la importancia de escoger las palabras
adecuadas en cada momento.
Nos enseño la importancia de las palabras Carpe Diem “Aprovecha el
momento” que me sigue acompañando hasta hoy. Porque aun cuando no se tiene
fuerza o poder siempre se podrá contar con las palabras y las ideas para
cambiar el mundo.
A través de las palabras de Whitman, Robert
Frost y William Shakespeare entre otros son sólo algunos de los más notables
autores citados en la obra de Peter Weir. “Sólo al soñar tenemos libertad.
Siempre fue así y siempre será.“ de Keating que nos invitó a no dejar de soñar.
Para Keating: El concepto de la conformidad
es la dificultad de mantener las propias convicciones ante otros. Para aquellos
que piensan, “Yo caminaría diferente”: Todos necesitamos ser aceptados. Pero
debéis pensar que vuestras convicciones son únicas y os pertenecen.
Aunque a otros puedan parecerles raras o inaceptables. Aunque toda la
manada diga ‘no está bien’.
Keating: No leemos y escribimos poesía
porque es bonita. Leemos y escribimos poesía porque pertenecemos a la raza
humana. Y la raza humana está llena de pasión. La medicina, el derecho, los
negocios y la ingeniería son carreras nobles y necesarias para la vida. Pero la
poesía, la belleza, el romanticismo, el amor… son las cosas que nos mantienen
vivos.
Keating se atrevió a romper las reglas,
liberando a sus alumnos de la tiranía establecida, obligándoles a ver las cosas
de manera distinta, y enseñándoles que las cosas dependen siempre del ángulo
con el que se miren.
“Libera tu mente. Usa tu imaginación. Di lo
primero que se te ocurra aunque sean tonterías”. Éstas son las palabras con las
que el profesor Keating intentaba liberar la creatividad e ingenio de uno de
sus alumnos. Porque si algo hemos aprendido en ‘El club de los poetas muertos’
es la importancia de pensar por nosotros mismos. Es decir, en ser lo que el
señor Keating llama un librepensador.
http://www.fotogramas.es/Cinefilia/Las-13-lecciones-de-El-club-de-los-poetas-muertos
Yo también disfruté muchísimo de esta película. La primera vez que la vi fue en clase de Ética en 4º de la ESO: Disfruté mucho viendo a Robin Williams adoptanto el papel de un profesor tan transgresor :)
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con las sensaciones que transmite Robin Williams en esta obra maestra: innovador, sentimental y motivador; buen homenaje Rosmy.
ResponderEliminarHola Fernando si es todo un clásico. A raíz de tu presentación hoy, imagino que conoces el Proyecto de Yo-yo Ma, cuya diversidad es total y maravillosa, como el Clarinetista Kinan Azmeh israelita, o la gaitera española Cristina Pato. Si no lo conoces, es muy interesante. https://www.youtube.com/watch?v=BWYo388T1XU Rosmy
ResponderEliminarHola Javi, si es cierto que fue una interpretación sublime de un grandísimo actor, que también resultó luchar con sus propios fantasma y que lamentablemente acabaron con él, como en la película con Neil! Saludos, Rosmy
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